En un mundo lleno de maravillas naturales, pocas criaturas despiertan tanta fascinación y rechazo a partes iguales como las abejas. Estos pequeños insectos, con su diligente labor de recolección de polen y néctar, han atraído la atención de las personas tanto por su organización social como por los valiosos productos que elaboran.
La famosa frase atribuida a Albert Einstein, «Si las abejas desaparecieran del planeta, a los humanos solo les quedarían 4 años de vida», resalta la importancia crítica de las abejas en el equilibrio de los ecosistemas y en la seguridad alimentaria mundial.
En la Alcarria y en la Sierra de Madrid, la apicultura es una actividad de gran importancia para muchas personas, tanto por la elaboración de productos como por actividades turísticas y de conservación de la naturaleza, muchas familias tienen negocios relacionados con la apicultura y su vida gira en torno a estos simpáticos bichitos.
¿Te pondrías un traje de apicultor y visitarías un colmenar?
Esta pregunta puede despertar una variedad de emociones, curiosidad, nerviosismo o incluso el miedo, para algunos, la idea de estar rodeado de miles de abejas puede resultar intimidante, mientras que para otros, representa una oportunidad de sumergirse en el fascinante mundo de la apicultura, si eres uno de esos aventureros que buscan experiencias fuera de los común gracias a nuestros amigos de Ecocolmena puedes convertirte en apicultor por un día y vivir una experiencia realmente emocionante, experimentarás que se siente al llevar un traje de apicultor, abrir una colmena y observar de cerca este pequeño mundo: el olor a madera, cera y propóleo, los panales repletos de miel, la jalea, el pan de abeja, el polen, los cuadros de cría e incluso, si tienes suerte, podrás ver a la abeja reina protegida entre un gran grupo de abejas.
Si esta experiencia es demasiado intensa para ti, también puedes participar en una cata de miel y probar los diferentes sabores y texturas que ofrece cada floración, desde la miel de color claro y dulce que produce la floración de romero, hasta el sabor intenso y color oscuro de la miel de montaña.
A lo largo del año hay varias ferias de apicultura y una de las más importantes es la Feria Internacional Apícola de Pastrana, que suele celebrarse a primeros de marzo, donde se imparten ponencias y se pueden comprar y degustar productos directamente extraídos de la colmena y otros más elaborados como productos cosméticos, licores y dulces.